GASTERÓPODOS

En creación.


Registro fósil


Los gasterópodos, gastrópodos o univalvos (Gastropoda, del griego γαστήρ gaster, "estómago" y ποδη poda, "pie"),
Existen aproximadamente más de 75.000 especies vivas y 15.000 fósiles descritas. Los primeros gasterópodos fueron exclusivamente marinos, y aparecieron a finales del Cámbrico (Chippeawaella, Strepsodiscus; formas del Cámbrico inferior, como Helcionella y Scenella no son considerados ya como gasterópodos, y la diminuta y espiralada Aldanella, también del Cámbrico inferior, probablemente no sea ni un molusco.





Turritellas, gasterópodos del Mioceno, del periodo Terciario de la Era Cenozoica o Terciaria




 



Durante el Ordovicico los gasterópodos fueron un grupo diverso presente en hábitats acuáticos.
En general, los gasterópodos de las rocas del Paleozoico inferior están en un estado de conservación demasiado pobre como para realizar una correcta identificación. A pesar de ello, el género Poleumita, del Siliurico, contiene 15 especies descritas. Los fósiles de gasterópodos son menos comunes en el Paleozoico que los bivalvos.
La mayoría de los gasterópodos paleozoicos pertenecen a grupos primitivos, unos pocos de los cuales sobreviven hoy día. Durante el Carbonifero se observan muchos de los modelos presentes de los gasterópodos actuales.






Agnesia acuta, gasterópodo perteneciente al período carbonífero








Pero a pesar de estas similitudes, la mayoría de estas antiguas formas no están directamente relacionas con las actuales.
Fue durante el Mesozoico cuando evolucionaron los ancestros de la mayoría de los gasterópodos actuales.
Uno de los primeros gasterópodos terrestres conocidos es Maturipupa, que se halló en Europa en el Coal Measures del Carbonífero, 
pero los parientes de los caracoles actuales son raros antes del Cretácico, cuando apareció el conocido género Helix.
En rocas del Mesozoico, los gasterópodos son algo más comunes y mejor conservados. Sus fósiles aparecen en sedimentos depositados en entornos tanto marinos y como dulceacuícolas. El mármol de Purbeck, del Jurásico, y el mármol de Sussex del Cretácico inferior, ambos del sur de Inglaterra, son calizas que contienen abundantísimos restos del caracol lacustre Viviparus.
Las rocas del Cenozoico proporcionan un gran número de gasterópodos fósiles, la mayoría de los cuales estrechamente relacionados con las formas actuales. La diversidad aumentó marcadamente al principio de esta era, junto con la de los bivalvos.
Ciertos rastros preservados en rocas sedimentarias antiguas se pensó que fueron causadas por gasterópodos arrastrándose sobre el barro y la arena. Aunque tales rastros son de origen debatido, algunos se parecen a los rastros que dejan los modernos gasterópodos.
Los gasterópodos fósiles pueden ser confundidos a veces con los amonites u otros cefalópodos con concha. Un ejemplo es Bellerophon, de las calizas del Carbonifero de Europa.
Los gasterópodos son uno de los grupos que mejor documentan los cambios en la fauna causados por el avance y el retroceso de los hielos durante el Pleistoceno.